Massa espera la plata del FMI para ser candidato a presidente, mientras define a su ministro de Economía

"Entre los dolares y la Presidencia"

Sergio Massa no lo dice, pero ya tiene decidido que será candidato a presidente de la Nación. “Vamos a ganar”, confía uno de sus laderos, apostando a la dispersión del voto opositor entre el candidato de Juntos por el Cambio (sea Horacio Rodríguez Larreta o Patricia Bullrich), Javier Milei y peronistas de derecha que le quitan votos a JXC, como “El Gringo” Schiaretti o Juan Manuel Urtubey.

De todas formas, para tomar su decisión, Massa espera que el Fondo Monetario Internacional (FMI) apruebe el desembolso anticipado de casi u$s 10.000 millones.

 Por ahora, Estados Unidos brinda declaraciones de apoyo y el staff del organismo habla de una negociación en progreso, pero los Derechos Especiales de Giro (DEG), la moneda del Fondo, no llegan. Sin embargo, hasta dentro de JxC creen que ese dinero va a llegar.

Por otra parte, Massa ya anticipó que no se puede ser simultáneamente candidato a presidente y ministro de Economía. Para la sucesión aparecen los nombres de Gabriel Rubinstein y Guillermo Michel.

 El primero es el actual viceministro, economista de formación liberal y una garantía de cumplimiento para el FMI. El segundo, en tanto, es el director general de Aduanas, tiene los títulos de abogado y contador, mientras que su filiación política es el peronismo.

Los dos cuentan con argumentos a favor y en contra. Rubinstein tiene un perfil más orientado al trabajo que a las polémicas, además de toda una carrera en el mercado financiero. Michel se puso el casco y ya alineó a varias empresas que hacían travesuras dentro de la Aduana. 

“Guillermo busca demostrar ejecutividad en el poder, no le importan los negocios, es una buena señal en cualquier época y más en esta”, cuenta alguien que lo conoce bien. Más allá de Rubinstein o Michel, por ahora se descarta la posibilidad de un “tapado”.