El pacto de Tigre
Mientras Malena Galmarini ataca por la intendencia, su pareja Sergio Massa acuerda por la presidencia.
Luego del programa de televisión donde hablara CFK y confirmará que no será candidata a nada, las acciones de los posibles candidatos subieron varios puntos en la ruleta electoral.
Todos vimos como ella convocaba a los hijos de la generación diezmada a hacerse cargo, pero también como resaltó la figura de Sergio Tomas, no solo porqué en sus palabras "agarro una papa caliente", sino porque no temió al costo político de ello. Para Cristina, ese es un valor a ponderar.
Tan seguro se sintió después de esa entrevista que los aparadores de Massa cruzaron de country y fueron a Villa la Ñata en busca de un acuerdo con su vecino Daniel Scioli. Un acuerdo que se resumiria en "el que gana lleva al otro".
La historia de encuentros y desencuentros entre Scioli y Massa viene de
lejos ya que ambos intentaron representar ese modelo moderado de gestión, lejos de las tensiones de la grieta y por ende, en su momento pescaron votos en la misma laguna, uno dentro del oficialismo kirchnerista y el otro conformando el Frente Renovador.
Pero también es cierto que se han cuidado de esmerilarse el uno al otro, un poco por su buena gestión en los distritos que les producia necesidades recíprocas y otro poco pero importante, por las relaciones que ambos tienen con lo que se conoce como el círculo rojo.
Desde esos puntos de contacto en La Posta Argentina podemos confirmar que Massa y Scioli han hecho un acuerdo para que el que este mejor en las encuestas para la primera quincena de junio será el candidato a presidente y el otro tendrá un rol importante en el futuro gobierno. Por supuesto que como en política nadie compra terrenos en Marte, el que no sea candidato a Presidente, estará en la lista de Diputados de la provincia de Bs. As.
Para la gente de Massa es un acuerdo importatisimo, porque el massismo no quiere PASO cuando se los consulta dicen que "será un candidato, el que sea pero uno solo", y porque como dijimos es un "rival" de los mismos votos.
Para el sciolismo cualquier opción lo devuelve a la política nacional por la puerta grande, sabiendo que es casi imposible sostener una candidatura presidencial sin gestionar nada.
¿Estamos a horas de escribir una nota del poder desde los country de Tigre?
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